En todas las biografías de Rodolfo, se dice que nació el 9 de Enero de 1927 en Choele Choel, una pequeña ciudad de la Provincia de Río Negro. No obstante, una investigación de Gabriel Martín pudo demostrar que este dato es erróneo, ya que Walsh nació en un pueblo llamado Lamarqué ubicado a 19 km de ese lugar, y el error se produce porque si bien dicha localidad fue fundada en el año 1900, fue reconocida con ese nombre recién en el año 1947 por Decreto 11593, nombrándosela mientras tanto «Colonia Nueva de Choele Choel». Debemos destacar, que ambas localidades se encuentran en el Valle Medio de Río Negro.
En relación al acta de nacimiento, el juez que la suscribió fue Pedro Hilderman y los testigos, el comerciante José María González y el Comisario Antonio de la Rosa.
El parto de su mamá Dora Gil fue asistido por Alcira Zuain. Tanto la mamá como su papá, Eduardo Walsh, eran descendientes de irlandeses.
La familia Walsh sobrellevó graves dificultades económicas, y dicha situación los obligó a separarse de sus hijos, algunos de los cuales fueron enviados con la abuela, siendo Rodolfo a los 10 años internado pupilo en un colegio Irlandés para pobres, durante tres años.
En 1941 se radica en Buenos Aires para continuar sus estudios secundarios.
A los 16 años ingresa a trabajar en Editorial Hachette como corrector, traductor y antologo hasta 1950.
A los 18 años, se incorpora como militante periférico a la Alianza Libertadora Nacionalista, un grupo de carácter anticomunista que postulaba la creación de un Estado corporativo y católico, que proponía limitar la propiedad privada y la disolución de los partidos políticos, pero que a la vez planteaba un tipo de «reforma agraria», la eliminación de los latifundios y el acercamiento a otros pueblos de América Latina.
Su órgano de prensa era la revista «Tacuara». Asimismo, expresaba estar en contra tanto del marxismo como del liberalismo. Sus líderes eran Juan Queraltó y Patricio Kelly.
Es dable destacar, que muchos de sus seguidores fueron leales al peronismo y se resistieron heroicamente ante la llamada «Revolución Libertadora», pero para esa época Rodolfo ya había roto con esta organización.
En 1950 contrae matrimonio con Elina Tejerina, Directora de una escuela para ciegos en La Plata, localidad donde pasa a residir, naciendo allí sus hijas Patricia Cecilia y María Victoria.
En ese mismo año, recibe el primer premio de Cuentos Policiales, organizado por Vea y Lea y la Editorial Emece. Debe destacarse, que el jurado que lo elige estaba integrado por Adolfo Bioy Casares, Leónidas Barleta y Jorge Luis Borges.
En 1956, medio año luego del golpe contra Perón, por un hecho fortuito, averigua que de la represión de la «Libertadora»: «hay un fusilado que vive», y comienza a investigar el tema de lo ocurrido en los basurales de José León Suarez, descubriendo también que tal hecho tiene sus consecuencias.
Walsh sabía que estaba en peligro, e inmediatamente abandona su trabajo, su casa en La Plata y pasa a la clandestinidad. En ese período se hace llamar Francisco Freyre, y mientras investiga vive en casas del Tigre y el Gran Bs.As. En 1957, la editorial Sigla publica «Operación Masacre un proceso que no ha sido clausurado».
En Junio de 1958 comienza a escribir en «Mayoría» treinta y dos artículos sobre la muerte de un abogado en manos de organismos secretos del Estado («El caso Satanowsky»).
En 1959 viaja a Cuba con Poupee Blanchard, quién fue su segunda mujer y allí juntamente con Gabriel García Márquez, Jorge Masetti, Piri Lugones y otros funda «Prensa Latina«, una agencia de noticias que pretende neutralizar las organizaciones internacionales de prensa que controlaban las noticias en el mundo. Estando en esa misión, intercepta un cable de inteligencia de los EEUU, que informaba la invasión conocida como Bahía de Cochinos (o Playa Girón para los cubanos) el 17 de Abril de 1961.
Este hecho casi insólito, fue comentado por Gabriel García Márquez de la siguiente manera:
«En realidad fue Rodolfo Walsh quien descubrió, desde muchos meses antes, que los Estados Unidos estaban entrenando exiliados cubanos en Guatemala para invadir Cuba por Playa Girón»..
«Jorge Masetti, había instalado en la agencia una sala especial de teletipos para captar y luego analizar en junta de redacción el material informativo de las agencias rivales. Una noche, por un accidente mecánico, Masetti se encontró en su oficina con un rollo de teletipo que no tenía noticias sino un mensaje muy largo en clave intrincada. Era en realidad un despacho de tráfico comercial de la «Tropical Cable» de Guatemala.
Rodolfo Walsh, que por cierto repudiaba en secreto sus antiguos cuentos policiales, se empeñó en descifrar el mensaje con ayuda de unos manuales de criptografía recreativa que compró en una librería de lance de La Habana. Lo consiguió al cabo de muchas horas insomnes, sin haberlo hecho nunca y sin ningún entrenamiento en la materia, y lo que encontró dentro no solo fue una noticia sensacional para un periodista militante, sino una información providencial para el gobierno revolucionario de Cuba.
El cable estaba dirigido a Washington por el jefe de la CIA en Guatemala, adscripto al personal de la embajada de Estados Unidos en ese país, y era un informe minucioso de los preparativos de un desembarco en Cuba por cuenta del gobierno norteamericano. Se revelaba, inclusive, el lugar donde empezaban á prepararse los reclutas: la hacienda Retalhuleu, un antiguo cafetal al norte de Guatemala».
Luego de dos años, regresa a Buenos Aires y trabajó en un negocio de antigüedades de propiedad de Poupee Blanchard.
Alquila una casa en el río Carapachay del Tigre llamada «Loriley« y desarrolla una fecunda actividad literaria, escribiendo sus mejores cuentos, entre ellos «Esa mujer», «El soñador», etc.
En 1962 se relaciona sentimentalmente con Susana «Pirí Lugones, nieta del poeta. En estos años simpatiza con un grupo Guevarista llamado «Malena», donde ya militaba su hija Vicky.
En lo intelectual, participa en continuas reuniones en la Editorial Jorge Alvarez, publicando libros importantes «Los Oficios Terrestres», «La Batalla» y «La Granada», escribe en la revista «Panorama», y se encuentra con otros intelectuales como David Viñas, Ernesto Jauretche, etc.
Luego de publicar «Un kilo de oro», viaja nuevamente a Cuba y participa en un congreso de Intelectuales (viaja con Paco Urondo, Ricardo Piglia, Dalmiro Sáenz y otros)
Era 1968 y a su regreso, en la escala que debía hacerse en esa época en Madrid, entrevista a Juan Domingo Perón, quién le presentará al líder sindical de los gráficos Raimundo Ongaro.
Posteriormente, inicia y dirige el semanario de la CGT de los Argentinos hasta el comienzo de la década del 70. Publica «Quién Mató a Rosendo García» y en lo personal se relaciona con Lilia Ferreyra, su última y definitiva pareja.
Políticamente profundiza su compromiso y comienza su militancia con la FAP (Fuerzas Armadas Peronistas), compartiendo el concepto revolucionario desarrollado en la llamada «Alternativa Independiente».
En 1972 escribe en el «Semanario Villero», y el 27 de Septiembre se estrena la película de su libro «Operación Masacre» dirigida por «Cedrón».
Un año después se desvincula de la FAP, y comienza a militar en la organización «Montoneros», en particular en su órgano de difusión, el diario «Noticias». Participa también en este proyecto su gran amigo Francisco Paco Urondo. En esta organización, cumple también tareas de inteligencia (bajo el nombre de «Esteban») junto a Horacio Campiglia de quién dependía organizativamente.
En 1976 plantea muy serios disensos con la organización. Crea la Agencia Clandestina de Noticias «ANCLA», utilizando la experiencia de Prensa Latina.
El 19 de Septiembrele allanan su casa en Tigre y no lo encuentran, el 29 de ese mismo mes su hija Viky muere en un enfrentamiento con fuerzas del Ejército, hecho que el propio Rodolfo narra en «Carta a mis amigos».
Paco Urondo es asesinado en Guaymallén Mendoza. Rodolfo también comenta su muerte con mucho dolor en un texto del 29/12/1976, reproducido por «El Porteño» en Abril de 1986.
El 24 de marzo de 1977, al cumplirse un año de la dictadura militar, envía su «Carta Abierta de un Escritor a la Junta Militar» a las redacciones de distintos diarios, pero no consigue su publicación. La misma, que se reproduce más adelante, comienza con una referencia a su casa en el Tigre:
«La censura de prensa, la persecución a intelectuales, el allanamiento de mi casa en el Tigre, el asesinato de amigos queridos y la pérdida de una hija que murió combatiéndolos, son algunos de los hechos que me obligan a esta forma de expresión clandestina después de haber opinado libremente como escritor y periodista durante casi treinta años. …»(RW)
El 25 de marzo, luego de despachar una tanda de cartas y dirigirse a una cita, se da cuenta que lo siguen y que se encuentra rodeado por la patota represiva y aunque la orden era capturarlo con vida (Astiz, experto jugador de Rugby debía «taclearlo»), se produce un enfrentamiento con ese comando militar en las avenidas San Juan y Entre Ríos, en la ciudad de Buenos Aires.
Walsh posee apenas un pequeño revolver cal. 22 que llevaba para Lilia, frente a una abundante metralla que poseían sus asesinos: Alfredo Astiz, Jorge «Tigre» Acosta, Jorge Radice, Antonio Pernías, Enrique Yon, Juan Carlos Rolón, Pablo García Velazco de la Marina, el prefecto Héctor Antonio Febres, Carlos Orlando Generoso del Servicio Penitenciario Federal, Julio César Coronel del Ejército y por la policía Ernesto Frimon Weber, Roberto González, Juan Carlos Linares, Pedro Salvia y Juan Carlos Fotea.
Según testimonios, su cuerpo fue trasladado a la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA).
Hasta hoy continúa desaparecido. Fue visto por última vez en ese lugar, con su pecho cortado al medio por una ráfaga de metralla.
