El investigador del 3iA y Director de la Unidad de Doble Dependencia IIIA UNSAM-CONICET, Rubén Quintana, habla sobre el Plan Integral de Conservación del Delta del Paraná (PIECAS-DP), del que forman parte la UNSAM junto al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible y otras cinco universidades nacionales

 

Bote

A través de un convenio marco recientemente firmado por la UNSAM, el Ministerio de Ambiente y otras cinco universidades nacionales, se estableció un plan para trabajar en la conservación y sostenibilidad  del ecosistema del Delta del Paraná. 

El investigador Rubén Quintana encabeza el equipo del 3iA que forma parte del proyecto. Antes de la firma  del mismo, participó de varias reuniones en las que también estuvieron el Rector de la UNSAM, Carlos Greco, y la Decana del 3iA, Susana Larrondo.

“El PIECAS es un plan integral estratégico para toda la región del Delta del Paraná que nace en 2008 como respuesta a un evento de grandes incendios”, explica Quintana. “En ese momento se quemaron más de doscientas mil hectáreas, lo que produjo un gran impacto sobre el ambiente, la flora y la fauna (incluso a especies en riesgo de extinción como el ciervo de los pantanos), la producción, los medios de vida de la población local y la salud. El humo no sólo afectó a los habitantes del Delta, sino que llegó a Rosario y a Buenos Aires”.  Fue así como la entonces Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable, junto con las  provincias de  Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos, pusieron en funcionamiento el PIECAS. El investigador señala que “por primera vez se pensó en el territorio desde su funcionamiento ecológico y no desde los límites jurisdiccionales, ya que el plan incluye conjuntamente a las tres provincias y la Nación”.

El plan comenzó a mostrar algunos avances hasta el año 2016, a partir del cual quedó totalmente desactivado. Quintana se alegró cuando a principios de este año, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible decidió reactivar el PIECAS. “Lo bueno es que esta decisión se tomó antes de que comenzaran los incendios, de manera que cuando empezaron, se aceleraron las acciones”, detalla.

Uno de los aspectos positivos de esta reactivación  es que apunta a que el PIECAS se transforme en un programa de mediano plazo (2020-2030),  en el que estén definidos  los  contenidos, los recursos humanos y el presupuesto. Y a  su vez, que  sea llevado a cabo, en parte, por las universidades públicas. “Este aspecto es central, ya que, en general, este tipo de estudios eran realizados por consultoras privadas”, advierte Quintana. Además de la UNSAM, participan la Universidad del Litoral, la Universidad Nacional  de Rosario, la Universidad Nacional de Entre Ríos, la Universidad  Autónoma de Entre Ríos y el Instituto Universitario de Seguridad Marítima.

Ganado

Hacia un ordenamiento ambiental del  territorio

El principal objetivo del PIECAS es el ordenamiento y la planificación  territorial desde un punto de vista sustentable. “El plan apunta a la sustentabilidad del Delta pero sin avanzar en acciones que impidan la actividad productiva. Creemos que el Delta debe ser productivo; lo que hay que pensar es qué tipo de producciones se deben desarrollar y de qué manera”, afirma el especialista de manera contundente.

El grupo que integran los investigadores del 3iA tiene una larga larga historia de trabajo en el Delta. lo cual es una fortaleza desde el punto de vista ambiental. Sin embargo, Quintana señala que “lo interesante es que otras Unidades Académicas de la UNSAM podrían hacer aportes en las otras temáticas que aborda el PIECAS, ya que abarca cuestiones tanto ecológicas como sociales, económicas, políticas y jurídicas”.

Desde la UNSAM se definirán cuáles son las líneas  puntuales en las que se va aportar al proyecto para luego, en una siguiente etapa, poder coordinar  con las otras universidades. Ese será el momento para interactuar y diseñar planes de acción. Específicamente, el 3iA podrá contribuir en la planificación de los planes de gestión para el ordenamiento ambiental del territorio y en temas tales como producción ganadera y pesquera sostenibles. Además brindará datos precisos en base al monitoreo y al inventario de humedales, entre otros.

Se trata de un programa muy completo, que apunta a avanzar en  la gobernanza de la región teniendo en cuenta la complejidad, ya que por un lado hay tres  jurisdicciones, además de  la Nación a través de la Administración de Parques Nacionales. El especialista hace foco en que “habría que revisar algunas cuestiones  poco claras, por ejemplo, consensuar normativas como en el tema de la pesca ya que las leyes que rigen son diferentes en las provincias de Entre Ríos y Santa Fé, aunque comparten el mismo río”.

Etapas del plan y prevención de incendios

El PIECAS está pensado en tres etapas, la primera de las cuales es la prevención. Por supuesto aquí el tema del fuego es central, por eso ya se pusieron en funcionamiento los “faros de conservación”,  junto con la Administración de Parques Nacionales. Quintana explica que “se trata de unidades de conservación distribuidas estratégicamente y equipadas con equipamiento como cámaras y drones, que pueden detectar focos de incendio y actuar de manera rápida.  El personal de Parques Nacionales cuenta con la logística necesaria lo que permitirá estar en constante comunicación con  lxs habitantes de la zona y con las autoridades provinciales”.

La segunda etapa, que se desarrolla paralelamente con la prevención,  está orientada a la planificación y al diseño de las políticas que se incluirán en el programa entre este año  y el 2022. Finalmente, está previsto que la etapa de implementación continúe hasta 2030.

El investigador resalta que “en el 3iA hay varixs investigadorxs que abordan la complejidad del Delta desde distintas líneas de investigación y transferencia, lo cual nos permitirá hacer un aporte multidisciplinario muy valioso”.