El presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Emilio Monzó, firmó la resolución que actualiza los ingresos de los legisladores “en concepto de gastos de representación y el valor de canje de los tramos aéreos y terrestres”, con subas que alcanzan el 133,8 %.

 

 

En un brindis con motivo del Día del Periodista, el titular de la Cámara baja justificó la decisión al sostener que es una manera de “transparentar” el presupuesto de ese cuerpo y garantizó que con las nuevas medidas “se gastará menos o igual” que con el sistema anterior de liquidación de ingresos.

La actualización de los ingresos de los diputados fue solicitada por una nota firmada por Nicolás Massot (PRO), Fernando Sánchez (CC-ARI), Héctor Recalde (FpV), Mario Negri (UCR), Oscar Romero (Bloque Justicialista) y Leonardo Grosso (Movimiento Evita), al tiempo que se opusieron el Frente Renovador, el GEN y el Frente de Izquierda.

Así las cosas, un diputado nacional pasará a cobrar 95 mil pesos entre dieta y gastos de representación, a lo que se agregan otros 40 mil pesos que corresponden a pasajes y otros 18 mil pesos en concepto de desarraigo, rubro que se asigna a los legisladores que residen a más de 100 kilómetros de la Capital Federal.

Según precisaron desde las autoridades de la Cámara, a partir del próximo año la actualización de los ingresos en conceptos de gastos de representación se realizará por el índice de inflación del INDEC.

De acuerdo a lo establecido en la reciente resolución, los tramos de pasaje terrestre pasaron de 295 a 690 pesos, mientras que la fracción aérea se llevó de 670 a 1350 pesos, ambos valores se fijaron en relación al costo del pasaje a la ciudad de Córdoba.

Dado que cada legislador recibe 20 tramos aéreos y 20 tramos terrestres, la suma que percibe se acerca a 40 mil pesos, cuando hasta el momento por este concepto percibían unos 20 mil pesos.

Vale aclarar que un diputado nacional tenía un ingreso bruto de 127.616 pesos que con los descuentos se ubicaba en unos 88 mil pesos, pero con el aumento de paritaria otorgado a los trabajadores legislativos pasó a 133.616, que de bolsillo representa unos 95 mil pesos.

En concepto de desarraigo, que se determina por un porcentaje de la dieta, los legisladores cobraban un poco más de 16 mil pesos, y con el aumento de paritaria la suma, que no es remunerativa, se elevó a 18.230 pesos.

Los legisladores que avalaron la medida justificaron el incremento al sostener que “los gastos de representación se encontraban en más de un 100 por ciento por debajo del valor que tenían desde su última actualización en el año 2011 tomando como parámetro los datos de inflación publicados por el INDEC”.