Entrevista a Olga Maidana, vecina del barrio Acuba donde se produjo el incendio que terminó con la vida de cuatro niñas de entre dos y siete años. “En diez días se llevaron siete vidas”, aseguró.

 

Olga Maidana tiene un comedor en el barrio Acuba de Villa Caraza. En los últimos días se han vivido incendios producidos por velas que los vecinos están obligados a utilizar por los reiterados cortes de luz en el barrio del conurbano bonaerense. Cuatro nenas de entre dos y siete años, que concurrían al comedor de Olga, fueron víctimas de una de las tragedias. En entrevista con Agencia Paco Urondo, Olga Maidana, cuenta la situación que viven actualmente en los barrios más desprotegidos de Lanús y las negligencias tanto del municipio como de EDESUR.

“Hay gente que tienen cuadrillas. El viernes llamé a una persona que se llama Américo Peralta que es el encargado de salir con las cuadrillas y me dijo que no podía venir a los barrios porque los vecinos los atacan. Qué solución me das, le pregunto. Vayan a hacer quilombo a EDESUR me dijo. Me trato re mal por teléfono. Al otro día se prendió fuego la casilla con ocho chicos y dos mayores adentro. Fallecieron cuatro nenas”.

“Se tiran la pelota uno al otro, que tenemos que ir al municipio. En el barrio no tenemos luz, no tenemos agua, es un asentamiento que hace diez años que está acá. La luz que tenemos es de los barrios linderos que nos enganchamos. Yo, pensando que iba a haber una desgracia de alguien que suba a un palo y se enganche de la luz, no me imaginé que iban a morir cuatro criaturas”.

“Son nenas que venían a mi comedor. Yo cocino de lunes a viernes a los chicos del barrio, le damos a la noche porque la mayoría son hijos de cartoneros. Son 120 chicos que vienen todas las noches y lo he hecho en velas, porque no voy a dejar de darle de comer a los chicos porque no tenga luz. Nos arreglamos como podemos pero nunca les falta el plato de comida”.

“El sábado enterramos a tres pibes más, también a causa de una vela. En el barrio San José Obrero. En diez días se llevaron siete vidas”.

“Lo que queremos es que venga alguien a nuestro barrio y nos ponga la luz, como todo ser humano queremos nuestros derechos”.