Este lunes circuló por las redes sociales -y varios medios de comunicación se hicieron eco- una noticia que aseguraba que Sergio, el hermano de Santiago Maldonado, había “ocultado” deliberadamente una mochila y un celular del joven desaparecido el 1ro de agosto tras una represión de Gendarmería. La familia salió a desmentir la versión que fue curiosamente replicada por decenas de trolls.

 

“Ante las versiones que circulan en algunos medios de comunicación en el día de hoy [lunes], creemos necesario expresar que pocos días después de la desaparición de Santiago, Sergio concurrió a la casa donde vivía su hermano y retiró algunas pertenencias personales”, comenzó señalando la familia a través de un comunicado oficial en la web santiagomaldonado.com. Entre esos objetos “se encontraba una mochila de tatuador con elementos para tatuar y otras pertenencias”, añadieron.

No obstante sostuvieron taxativamente que esa “no es la mochila que Santiago portaba en el momento de su desaparición y la cual es motivo de investigación”.

Además Sergio se hizo también con “un celular con el que Santiago se comunicaba con su familia” pero este teléfono “solo contiene sms y llamadas que ya fueron analizadas en los primeros días de la investigación” y, al igual que la mochila, tampoco es el que llevaba encima cuando fue desaparecido.

Finalmente, ante las denuncias de presunta ocultación de pruebas, recordaron que ningún familiar de Santiago fue citado a declarar por el apartado juez Guido Otranto mientras estuvo al frente de la causa. “En la primera oportunidad en que se le preguntó sobre este tema, en su declaración testimonial ante el Juez [Gustavo] Lleral de la semana pasada, Sergio refirió esa circunstancia y el Juez le requirió que en el transcurso de esta semana esos objetos personales de Santiago sean llevados al juzgado para su análisis”, apuntó el comunicado.

Otro intento de desviar la investigación

Desde el 24 de agosto la carátula de la causa es “desaparición forzada”, las escuchas de los teléfonos de Gendarmería dan cuenta de que se disparó contra los manifestantes dentro del territorio y que una persona -presuntamente Maldonado- fue subida a una camioneta de esa fuerza de seguridad. A pesar de estas pruebas medios de comunicación, trolls que actúan a favor del gobierno nacional y algunos funcionarios siguen buscando desviar y confundir con información tergiversada o directamente falsa.

Eso fue lo que sucedió en este caso. Tal como reseñó el especialista en políticas de comunicación Luciano Galup, apenas 20 cuentas fueron responsables del 18% de los tweets sobre la noticia falsa de la mochila de Santiago. En apenas dos horas publicaron 837 tweets al respecto.

Los distintos medios del grupo Clarín y otros se hicieron eco de la información errónea argumentando que esto era una maniobra de la comunidad mapuche que había “retenido”, en connivencia con la familia, pruebas importantes para la investigación que “estaban siendo buscadas” desde el comienzo. Apenas unas horas después tuvieron que salir a rectificarse, aunque la noticia ya había sido lanzada generando mayor confusión.

Así la historia se repite tal como sucedió con las versiones de que Santiago había escapado a Chile o se encontraba en un pueblo de Entre Ríos o que había sido apuñalado. Sin ninguna prueba firme todas estas hipótesis fueron lanzadas para evitar concentrar la atención en la Gendarmería a donde indefectiblemente y cada día con más certezas, apunta el proceso judicial.