Los datos de decesos se mantienen a la baja desde hace semanas pero los de contagios están en alza.
Las autoridades iraníes anunciaron este sábado un alivio de las restricciones en las mezquitas, restaurantes y universidades impuestas por la COVID-19, que causó en las últimas 24 horas en el país 35 fallecimientos, la cifra más baja desde hace 70 días.
Irán es el décimo país más infectado por la epidemia del Covid -19
Los datos de decesos se mantienen a la baja desde hace semanas pero los de contagios están en alza. Según informó hoy el Ministerio de Salud, se han contabilizado 1.757 nuevos casos, elevando el global a 118.392.
De ese número de enfermos, 6.937 han fallecido y más de 93.000 se han recuperado, indicó el portavoz de Salud, Kianush Yahanpur, quien señaló que la situación más delicada en la actualidad se vive en la provincia suroccidental de Juzestán, que tiene el mayor número de hospitalizaciones.
Juzestán es considerada una zona roja o de alto riesgo, de acuerdo a la clasificación de las autoridades iraníes, que han designado también áreas blancas y amarillas dependiendo de la incidencia del coronavirus.
En las zonas blancas, que en la actualidad representan 218 localidades, ya se han abierto las mezquitas, además de todo el comercio, y se han celebrado los rezos del viernes.
En el resto del país solo han abierto puntualmente los templos para las importantes Noches de Qadr del mes de ramadán pero, según anunció hoy el presidente Hasan Rohaní, también lo harán para las oraciones del Eid al Fitr.
Rohaní explicó que las ceremonias de Eid al Fitr, que marcan el fin del Ramadán, se celebrarán en mezquitas y espacios abiertos «de acuerdo con las instrucciones de salud, pero no en grandes salas de oración».
Con respecto a la reapertura de los lugares sagrados y los santuarios, el mandatario informó de que está prevista para después del Ramadán, es decir, a partir del 24 de mayo, pero únicamente durante seis horas al día.
También en esas fechas volverán a abrir los restaurantes y se permitirá más actividad a los hoteles, mientras que a partir del 6 de junio se reanudarán las clases en las universidades y los eventos deportivos pero sin espectadores.
Además, en las zonas blancas se permitirá que el próximo viernes se conmemore el importante Día de Quds (Jerusalén), aunque más en forma de concentración en las mezquitas tras el rezo y no como marchas.
En Teherán Rohaní explicó que se va a organizar una marcha «simbólica» por el recorrido habitual a la que los asistentes acudirán en sus automóviles y que será controlada por la Guardia Revolucionaria.
El Día de Quds fue establecido en 1979 por el ayatolá Ruholá Jomeiní, fundador de la República Islámica, para pedir la liberación de Palestina y la caída de Israel
