En una semana, en Paraná, Entre Ríos, el río perdió 29 cm llegando a la marca histórica de 16 cm.

 

Itapu

 

El río Paraná sigue bajando y el lunes 18 de mayo, se estableció un nuevo récord: a la altura de la ciudad de Paraná, capital de Entre Ríos, llegó a la marca de 16 cm, dejando al desnudo grandes bancos de arena; hecho que no ocurría desde hace más de 130 años.

Esto perjudica tanto a la navegación como a la pesca, ya que a esta altura del año el río tendría que estar entre 3,50 y 3,80 m.

Según los especialistas esta impresionante bajante que viene desde febrero, obedece en gran parte a la falta de lluvias en toda la zona, en especial en el sur de Brasil, y para colmo el pronóstico no es muy alentador en este sentido ya que, en los próximos meses, se espera la llegada de “La Niña”; este fenómeno se caracteriza por traer grandes sequías.

Por la vía diplomática se realizaron gestiones entre los gobiernos de Argentina, Brasil y Paraguay ante el Consejo de Administración de la Represa hidroeléctrica Itaipú; esta tomó la decisión de abrir sus compuertas durante 12 días para ayudar a levantar el nivel del río Paraná, en especial para mejorar el paso de las embarcaciones dedicadas al comercio.

La empresa tomó esta resolución teniendo en cuenta los inconvenientes que venia acarreando el tránsito fluvial sumado a la crisis económica debido al Covid-19.

Mientras tanto, el Delta recupera algo de lo perdido ayer, destacándose Baradero, provincia de Buenos Aires, que subió 55 cm su nivel.

El río Uruguay sin muchas modificaciones, pero con tendencias a la suba: allí, Gualeguaychú, Entre Ríos, creció 48 cm. En tanto el Río de la Plata, de ayer a hoy también se recuperó y creció 46 cm.