Los indicadores de ambos factores económicos no muestran una mejora, indica un informe del Centro de Investigación y Formación de la Argentina.

 

El leve crecimiento y la desaceleración de la inflación no reflejan un «cambio sustentable de tendencia» en la actividad económica, porque no se recuperará el consumo ni la inversión, según un informe del Centro de Investigación y Formación de la Argentina (CIFRA).

El informe señala que con «el sector primario, de servicios, financiero y la construcción, impulsada por la obra pública, explicaron el cambio de tendencia, en tanto que la industria disminuyó el vértigo de la caída y en mayo anotó el primer crecimiento interanual tras 15 meses negativos».

Agrega que más allá de esas mejoras hay «una escasa sustentabilidad» para que el cambio de tendencia continúe».

El estudio agrega que ello se debe a los acuerdos paritarios por debajo del nivel de inflación e «indican que el consumo no será la variable decisiva para sustentar el crecimiento».

Agrega también que «son escasas las oportunidades de inversión productiva en el marco del sostenimiento de altas tasas de interés, la apreciación cambiaria y la compleja situación internacional en la que resalta la crisis de Brasil».

«Bajo estas circunstancias, los problemas en el sector externo se acentuaron en el marco del nuevo ciclo de endeudamiento, la valorización financiera y la fuga de capitales», añade el trabajo del CIFRA que depende de la Central de Trabajadores (CTA).

Recuerda que en el primer semestre las colocaciones de deuda totalizaron 33.948 millones y que fueron «similares al endeudamiento de todo el 2016».