Maniobras en el conteo de votos, que mostró un triunfo holgado de Cambiemos a las 21 hs., con diferencia del 6%, llegando al 0.01 % a las 3.27 hs. de la madrugada.
El foco de los análisis y expectativas se centra en la resolución final de la elección en la provincia de Buenos Aires, que es la más importante del país, por la cantidad de habitantes que tiene.
Alrededor de las 21 hs. el festejo del macrismo (con los característicos globos, baile y discursos zen) se instalaba en todas las pantallas. Se daba por hecho que Esteban Bullrich, precandidato a senador por Cambiemos, le sacaba un 6% de ventaja a Cristina Fernández en la provincia. Sin embargo, el kichnerismo mantenía el silencio y apostaba a esperar los resultados de algunos distritos del conurbano bonerense, cuya mesas no habían sido contabilizadas aún.
Por orden del oficialismo, el conteo de los votos en las mesas de Buenos Aires se frenó y hasta el momento en la página oficial quedó en 95,68% de mesas escrutadas. El kichnerismo salió rápidamente al cruce denunciando una maniobra del macrismo para mostrar un falso triunfo, ya que suponen que con el conteo del 4,32% faltante lograrían ganar, por poco, en la provincia. «Secuestraron los votos de 300.000 bonaerenses. Hicieron aparecer un resultado y lo congelaron para hacer un show en el horario central de la televisión. Tenemos comprobados que del 100% del personal de data entry que hace la carga, han dejado solamente trabajando el 20%. Por esa razón la carga cada vez es más lenta», denunció, pasadas las 2, Leopoldo Moreau, en referencia a que el gobierno cerró el escrutinio, manipuló la prioridad de la carga, sin el recuento de 1500 mesas correspondientes a la primera y tercera sección del conurbano bonaerense donde, según asegura el kichnerismo, se impuso CFK.
Por su parte, CFK habló a las 3.44 de la madrugada y, en consonancia con Moreau, remarcó: «Nunca pensé que iba a tener que pedirles perdón a todos los argentinos por este bochorno que hemos vivido aquí en nuestro país. Lo que hoy vivimos no lo vi nunca en ninguna elección. Este montar un show para que salga en el prime time de la televisión como si se tratara de un timbreo o de subirse a un colectivo para simular algo, es sobre todo una ofensa a la democracia y a los ciudadanos que fueron a depositar su voto y que lo menos que se merecían era conocer cuál era el resultado de las elecciones en la Provincia».
Al respecto, existieron numerosas denuncias. Una de ellas, la del periodista Federico Lemos, que trabajó anoche como data entry en el Correo Argentino, habló con “Página Abierta” sobre cómo se llevó a cabo el recuento de datos.
“A partir de las 2 AM fue un desastre total. Cuando empezaron a llegar los telegramas de La Matanza, Quilmes, Florencio Varela y Berazategui, comenzaron las intermitencias y no llegaron más telegramas”, señaló Lemos en diálogo con Jorge Chamorró.
“Veíamos que Cristina iba acortando diferencias con Bullrich, hasta que en un momento circuló la información que estaba 34,15-34,14 y el sistema dejó de funcionar”, relató.
El periodista expresó: “Nos dijeron que al llegar al 95% se cortaría el trabajo”. Además, señaló que a las tres de la madrugada “les dijeron a una 80 personas que se fueran y eso se repitió también a las cuatro”.
A las 6 de la mañana, «nos dijeron que el escrutinio había terminado”. “El último telegrama habrá llegado a las 5 menos 10 de la mañana aproximadamente. Estuve una hora sin que cayera ningún telegrama, y de 2 a 5, con intermitencia de 20 minutos por cada telegrama”, concluyó Lemos, quien opinó que era “una clara opereta de los medios de comunicación y del Gobierno para que la gente se fuera a dormir pensando que ganó Cambiemos”.
Después del reñido conteo de votos en la provincia de Buenos Aires entre Unidad Ciudadana y Cambiemos, Cristina Fernández emitió un comunicado de prensa al respecto.
«Nos hemos enfrentado a un poder político que no solo controla el poder nacional, sino el provincial y el de la Ciudad de Buenos Aires», expresó.
Por otro lado, los integrantes de la Unidad, Leopoldo Moureau y Graciana Peñafort, dieron una conferencia de prensa cerca de las 18 del día lunes 14, 24 horas después del cierre de las elecciones.
«Ayer asisitmos a un hecho inédito desde el 83 en adelante que es que un acto eleccionario es utilizado para un golpe de efecto publicitario», afirmó Moureau.
Según el candidato a diputado, el Gobierno Nacional ordenó la retención de datos para lograr un resultado «ficticio» durante unas horas para que Cambiemos pueda montar un «show publicitario con el Mago sin Dientes incluido».
«Al final no pudieron sostener la mentira. Decidieron paralizar los cómputos de 1500 mesas. Estamos hablando de 300 mil votos que han quedado fuera del conteo», aclaró.
La abogada Graciana Peñafort comentó que los partidos tendientes a votar a Unión Ciudadana tienen menor porcentaje escrutado que los partidos que votaron a Cambiemos.
El escrutinio provisorio terminó en con un diferencia de 0.08 %. Para los resultados definitivos se deberá esperar 10 días
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